A medida que se realiza actividad muscular, se logra una adaptación del corazón, que responde a las exigencias suscitadas por el ejercicio.
Esta adaptación se ha interpretado como una reacción normal y semejante a la que ocurre en el músculo.
Pudo comprobarse que los corazones de los atletas que realizan entrenamientos sistemáticos son más grandes que los de los individuos sedentarios de la misma edad y peso.
Las adaptaciones cardíacas son consecuencias de una hipertrofia de las paredes del miocardio, en especial la de los ventrículos, y son más frecuentes en los atletas que efectúan actividades de resistencia prolongadas. Esta hipertrofia del miocardio trae como consecuencia un aumento del volumen sistólico y ha sido llamada Corazón de atleta.
El corazón de atleta es la resultante de las adaptaciones morfofuncionales que tienen lugar en el corazón de los atletas que practican actividades físicas de gran intensidad en forma prolongada y es producida por el aumento del tamaño del órgano, con hipertrofia de sus paredes y aumento de volumen de sus cavidades.
En reposo, el corazón de atleta está bradicárdico, pero en el esfuerzo intenso su frecuencia aumenta más rápidamente que el individuo sedentario y llega más rápido a la fase estable, que es siempre menor para la misma actividad física que en el sedentario. La bradicardia de reposo del corazón de atleta es una verdadera reserva de energía que se utiliza en el entrenamiento intenso.
El corazón de atleta está bien irrigado, con un desarrollo importante de los capilares del miocardio.
Si el atleta abandona la práctica deportiva, con sus intensos entrenamientos, el volumen del miocardio se reduce, al igual que la musculatura esquelética y pierde dicha hipertrofia.
Esta adaptación se ha interpretado como una reacción normal y semejante a la que ocurre en el músculo.
Pudo comprobarse que los corazones de los atletas que realizan entrenamientos sistemáticos son más grandes que los de los individuos sedentarios de la misma edad y peso.
Las adaptaciones cardíacas son consecuencias de una hipertrofia de las paredes del miocardio, en especial la de los ventrículos, y son más frecuentes en los atletas que efectúan actividades de resistencia prolongadas. Esta hipertrofia del miocardio trae como consecuencia un aumento del volumen sistólico y ha sido llamada Corazón de atleta.
El corazón de atleta es la resultante de las adaptaciones morfofuncionales que tienen lugar en el corazón de los atletas que practican actividades físicas de gran intensidad en forma prolongada y es producida por el aumento del tamaño del órgano, con hipertrofia de sus paredes y aumento de volumen de sus cavidades.
En reposo, el corazón de atleta está bradicárdico, pero en el esfuerzo intenso su frecuencia aumenta más rápidamente que el individuo sedentario y llega más rápido a la fase estable, que es siempre menor para la misma actividad física que en el sedentario. La bradicardia de reposo del corazón de atleta es una verdadera reserva de energía que se utiliza en el entrenamiento intenso.
El corazón de atleta está bien irrigado, con un desarrollo importante de los capilares del miocardio.
Si el atleta abandona la práctica deportiva, con sus intensos entrenamientos, el volumen del miocardio se reduce, al igual que la musculatura esquelética y pierde dicha hipertrofia.
1 comentarios:
Simple, cortito y completo, lo que la gente le interesa! muy buen articulo! un abrazo Jonathan
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