miércoles, 1 de julio de 2009

La respiración al entrenar

Por el entrenamiento deportivo se producen modificaciones en el funcionamiento del aparato respiratorio, como aumento de la expansión torácica, que conlleva el de la amplitud respiratoria, así como un incremento de la frecuencia de la respiración.

En determinadas actividades deportivas se efectúa la maniobra de valsalva, por la cual, después de varias inspiraciones y espiraciones profundas, se hace una inspiración profunda, se bloquea la glotis y se realiza un esfuerzo espiratorio; de esa manera se ofrece un buen punto de apoyo para los músculos del tronco y de los miembros superiores. Esto se observa en disciplinas tales como musculación, lanzamientos, saltos, etc. Una vez terminada la actividad, se espira fuertemente, en forma explosiva.

En el remo, el ritmo respiratorio es afectado por la cadencia de las remadas y se aprovecha en el tórax fijo, fundamentalmente en espiración, como punto de apoyo de los miembros superiores.

En las carreras cortas, de velocidad, por ejemplo 100 mts llanos, se efectúa la maniobra de valsalva bloqueando el tórax desde la partida. Por lo común, la espiración solo se realiza después de la llegada. En las carreras de medio fondo y de fondo, se adapta el ritmo respiratorio a los movimientos; de acuerdo con las necesidades del atleta, se hacen movimientos respiratorios cada dos o tres pasos, procurando la economía de esfuerzo y una buena absorción de oxígeno.

En la natación, en procura de un mejor rendimiento mecánico, la cabeza del nadador debe permanecer sumergida la mayor parte del tiempo, y es por ello que la frecuencia respiratoria debe adaptarse a la frecuencia de las brazadas. Esta limitación en el nadador es compensada con un aumento de la amplitud respiratoria. En personas entrenadas se aprecia una armonía entre los movimientos musculares y los respiratorios.



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